El empresario del tatuaje y la batalla cultural

La decisión de Cristina y los dilemas del Establishment
22 junio, 2011
Habemus Vice
26 junio, 2011

 

Osvaldo Drozd

En el lanzamiento que realizaran el pasado 18 de junio en La Matanza, Ricardo Alfonsín y Francisco de Narváez; el empresario colombiano manifestó que Cristina tenía miedo a presentarse a la reelección, por la paliza electoral que él le había propinado al kirchnerismo en el 2009. El día 21 la presidenta anunció que iría por un nuevo mandato, demostrándole entre otros al “colorado”, que el proyecto nacional y popular iniciado en 2003 no se detiene y además va por su profundización, mal que ésto les pese a todos estos mequetrefes, que arribaron a la política como continuidad de sus negocios.
Faltaba entonces que el empresario del tatuaje, ayer manifestará de manera poco feliz, que Néstor Kirchner eligió morir para no volver a ser derrotado este año, y posteriormente tener que pedir disculpas a la familia del ex presidente. Todo esto podría ser anecdótico y pintar de cuerpo entero a un personaje, del cual al menos yo me siento en las antípodas, pero la existencia de tipos como éste, y que además lograron, y esto no es cuento, ganar las elecciones de 2009, merecen una reflexión más profunda, y que excede a la política y se mete en el sentido común de gran parte de la población de nuestro país, y que sin dudas concierne a lo que estamos llamando batalla cultural.
De Narváez ganó las legislativas de hace dos años, y le ganó a Néstor Kirchner, y si bien esto parece algo lejano, perimido y absurdo, en verdad no lo es, y es en este argumento donde el empresario se sostiene para decir las cosas que dice, intentando seducir a ese “otro” que alguna vez le depositó su voto.
Profundizar el modelo, es profundizar una revolución cultural en marcha, que se desplaza con avances y retrocesos, y que sin dudas cuenta con núcleos duros de resistencia muy fuertes, que si bien son incentivados por los medios hegemónicos, hay que reconocer que esos núcleos están metidos en la cabeza de una gran mayoría. Que haya surgido una oleada muy importante de militantes que vuelven a reivindicar la política, no exime de considerar que aún siguen existiendo estereotipos culturales que son dignos de admiración masiva, y entre ellos, están los empresarios exitosos, que más que mostrar neuronas, muestran sus más viles pasiones y el poder para hacerlas realidad. De Narváez ganó diciendo “Alica alicate” y manifestando tener un plan que nunca se vio, pero fundamentalmente ganó por mostrarse con su doble en el programa de Tinelli, bailando reggetón, y exhibiendo la más cruda frivolidad, que mal que nos pese también existe en la sociedad.
Ayer veía por TN una entrevista a Mauricio Macri, otro exponente de la política cholula, y cuando tenía que hablar concretamente de política se notaba que lo hacía con cierta rigidez, pero hábilmente el periodista le cambia el tema y lo lleva a hablar sobre la posibilidad de que River se vaya al descenso, y es ahí donde Macri saca su verdadera faceta y comienza a hablar de fútbol, con una fluidez que contrastaba considerablemente, con cuando le tocaba hacerlo sobre política. Si bien todos los sondeos de la ciudad de Buenos Aires manifiestan que habrá segunda vuelta, el empresario encabeza la intención de votos, y si bien muchos consideran al electorado de la CABA como algo muy diferente al resto del país, considero que esto puede ser cierto en cuanto a lo estrictamente político partidario pero no en cuanto a lo ideológico cultural.

Comments are closed.