Por Isaac Quispe Rojas.
Los padres de los alumnos de la Escuela Especial para ciegos y disminuidos visuales Nº 515 de Gonnet, realizan desde el lunes una medida de fuerza en rechazo a la actuación de la Dirección General de Escuelas que sumarió y suspendió de su cargo a la directora y piden hablar con el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, para que interceda y solucione el caso que consideran injusto.
El problema comenzó en diciembre del año pasado cuando Sonia Maluendres, directora de la mencionada institución, firmó un convenio precario con la Sociedad de Fomento Polideportivo Gonnet, que tenía que elevarse al Consejo Escolar y aprobarse. Pero la mencionada institución incumplió el acuerdo y empezó con el alambrado de una parte del predio perteneciente a la escuela.
Como el club había ascendido en el campeonato de fútbol de liga, necesitaban un campo para hacer sus prácticas deportivas, ya que la liga les exigía tener una cancha alambrada, apta para una competencia. Y no tuvieron mejor idea que poner un alambrado perimetral en la escuela. Ante esa situación, la directora le reclamó a la sociedad de Fomento el incumplimiento.
Posteriormente, en febrero de este año, los padres toman contacto con las autoridades del club pero no obtuvieron respuesta. Vladimir, uno de los padres le explicó a El Tranvía que “necesitamos movilizarnos para visibilizar este tema y hacer los reclamos pertinentes, fuimos hasta el ministerio de Educación, la Dirección General de Escuelas Especiales y recién hace una semana culmina todo ese laberinto de reclamos con la puesta en valor de la cancha del predio de la escuela, pero la sumarían a la Directora de la Escuela”.
Más adelante, Vladimir señalo que “Al tomar conocimiento de que la directora fue separada de su cargo decidimos la toma de la escuela para reclamar la presencia del ministro Finocchiaro para que hable con nosotros y nos dé una explicación del por qué de ese sumario, que nosotros consideramos injusto”.
La toma de la escuela empezó este lunes y los padres informaron que la semana pasada presentaron un par de escritos y obtuvieron como respuesta un silencio absoluto, que consideran sospechoso desde los primeros momentos del conflicto. Lo que les llama la atención. En concreto, exigen que les den una solución y una explicación al sumario. Por lo pronto, lo que se ve es la falta de respuestas.