Casa Mariani-Teruggi: nuevo cumpleaños de Clara Anahí en ausencia

Acto frente a la casa Mariani-Teruggi.

Por Walter Barboza

El 24 de noviembre de 1976, cerca de las 13:15, la casa del matrimonio Mariani-Teruggi, ubicada en la calle 30 entre 55 y 56 de la ciudad de La Plata,  fue rodeada, atacada y saqueada por las fuerzas de la dictadura cívico-militar que había interrumpido el proceso democrático iniciado en la Argentina en 1973. El violento operativo, que duró cerca de cuatro horas, fue encabezado por el Comisario Miguel Etchecolatz, lugarteniente de Ramón Camps en la Provincia de Buenos Aires, aunque la historia cuenta que también participaron del mismo Carlos Guillermo Suárez Mason, jefe del Primer Cuerpo del Ejército; Adolfo Sigwald, jefe de la 10° Brigada de Infantería; el propio Ramón Juan Alberto Camps, jefe de la Policía de la Provincia de Buenos Aires; Roque Carlos Alberto Presti, jefe del Regimiento N°7, área operacional 113; José Clemente Forastiero, jefe del Cuerpo de Infantería Motorizada; Oscar Ioppolo, jefe de la Unidad Regional 4ta de La Plata y Osvaldo Sertorio, jefe de la Comisaría 5ta de La Plata.

En el interior de la vivienda se encontraban Diana Teruggi, su pequeña hija Clara Anahí y cuatro compañeros de militancia de sus padres: Daniel Mendiburu Eliçabe (de 25 años, estudiante de Arquitectura), Roberto César Porfidio (de 31 años, Licenciado en Letras), Juan Carlos Peiris (de 28 años, antenista) y Alberto Oscar Bossio (34 años, médico).

En la casa, que se había constituido en una “casa operativa” de la organización político-militar “Montoneros”, funcionaba una imprenta clandestina en la que se imprimía la revista “Evita Montonera” con la que la conducción nacional de la organización -en el exilio y la clandestinidad- elaboraba parte de su política hacia la militancia. En el ataque fueron asesinados todos menos la pequeña Clara Anahí Mariani, hija de Diana Teruggi y Daniel Mariani, quien fue sacada del interior con vida y entregada en adopción ilegal a alguien cercano a los represores.

El asalto comenzó cuando el grupo militante se preparaban para almorzar, mientras la cuadra era cortada y algunos militares se parapetaban en posición de ataque en los techos de las viviendas vecinas. Fue entonces cuando comenzaron a disparar salvajemente hasta dejar la casa semidestruida. Los impactos de bala, y un boquete que fuera provocado por un proyectil de tanqueta, todavía permanecen como testigos del episodio. Pero cuando todo parecía terminado un helicóptero arrojó a la casa una bomba de fósforo que incendió los cuerpos de quienes se hallaban allí ya si vida.  A Clara Anahí la sacaron con vida, porque su madre logró protegerla colocándola en una bañadera y cubriéndola con unos colchones.

Daniel Mariani, quien se encontraba en Buenos Aires trabajando en el momento del ataque, fue asesinado en el mes de agosto de 1977 en las calles 132 y 35, cuando estaba terminando de colaborar en la mudanza de Laura Carlotto, una de las hijas de la Presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Barnes de Carlotto.

La Casa permaneció bajo custodia policial por lo menos durante de un año. Después de ello, la casa fue intrusada y saqueada en varias oportunidades. O bien fue ocupada por distintas organizaciones políticas. Recién en 1998 la Asociación Anahí logró que devolvieran el inmueble.

Este fin de semana, y con la presencia de numerosas organizaciones políticas y sociales, pero fundamentalmente encabezada por Chicha Mariani, fue celebrado en la casa de la calle 30 un nuevo cumpleaños en ausencia de Clara Anahí, la que hoy cumple 38 años. Esta vez el acto fue mucho más significativo, puesto que ocurrió en el marco de la encuentro de Guido, el nieto de Estela de Carlotto, lo que renovó aún más las esperanzas de Chicha Mariani y de quienes colaboran con el proyecto de mantenimiento de la vivienda.

La casa, se ha constituido en un verdadero museo en el que los visitantes pueden encontrarse con una parte importante de la vivienda original, algunas remodelaciones necesarias para su mantenimiento, y puesta en valor, y con los restos de lo que fue el ataque perpetrado por la fuerzas represivas. La misma puede se visitada los días sábados de 14 a 17hs. Miembros de la Asociación Anahí acompañan a los visitantes en un recorrido con no más de 8 personas, que dan explicaciones sobre la disposición de la vivienda y lo ocurrido allí aquel 24 de noviembre de 1976.