Violencia y racismo institucional en La Plata

En un comunicado de prensa desde la Coordinadora y Consejería para Migrantes de la Facultad de Trabajo Social de la Universidad Nacional de La Plata, denunciaron la violencia y el racismo institucional de parte de la policía local y de la Municipalidad de La Plata con respecto al maltrato que reciben los trabajadores ambulantes de nacionalidad senegalesa.

El hecho se desató la mañana del lunes con un fuerte despliegue que llevó a cabo la policía local sobre avenida 7, donde se le incautó la mercadería a los trabajadores ambulantes senegaleses. El accionar de los agentes generó el repudio de la gente que transitaba por el lugar y al no poder continuar con el operativo se llevaron detenido a un trabajador africano de nombre «Bamba».

Al respecto, desde la Coordinadora y Consejería para Migrantes denunciaron el racismo institucional de parte de las autoridades municipales: «La policía local de la Municipalidad de La Plata vulnera los derechos de las personas migrantes y haciendo uso de la fuerza llevaron detenido a un ciudadano de nacionalidad senegalesa, por dedicarse a la venta ambulante». Y continuaron: «Este accionar viene de la mano de un ataque sistemático de las fuerza de seguridad en toda la provincia, donde hemos visto como la policía arremete contra los vendedores ambulantes de nacionalidad africana. Los trabajadores ambulantes en la mayoría de los casos son detenidos por ‘faltas’ y les quitan la mercadería, profundizando la vulnerabilidad a la que están expuestos los y las migrantes».

Para finalizar, desde la Coordinadora repudiaron «el racismo institucional y la escalada de la violencia policial contra los senegaleses» y denunciaron «la hipocresía del gobierno nacional, provincial y local que vulneran los derechos de los migrantes pero no hacen nada respecto del origen de las mercaderías que venden los migrantes y que salen de aduanas argentinas.» Y remarcaron: «En un contexto donde escasea el trabajo, la venta ambulatoria es una forma de supervivencia a la que están vedados los ciudadanos senegaleses, dejándolos en una situación de vulnerabilidad. A pesar de ello, es necesario mencionar la solidaridad de la gente que transitaba por el lugar, que inmediatamente brindó su apoyo a los trabajadores ambulantes y denunció el accionar de la policía local, evitando que el operativo continúe».