(ABI).- El vicepresidente Álvaro García Linera aseguró el sábado en la ciudad de Santa Cruz que la Ley de la Madre Tierra es «equilibrada» y dejó abierta la puerta del diálogo a los productores que consideran que esta norma golpea sus intereses.
«La Ley de la Madre Tierra al tiempo de exigirnos a todos los bolivianos una relación convivencial, respetuosa con el medio ambiente, también nos permite que obtengamos de la Madre Tierra los medios necesarios para nuestra subsistencia, para nuestro crecimiento», explicó a los periodistas.
«No es una ley fundamentalista ni por el lado del productivismo, ni fundamentalista por el lado del ecologismo, es una ley equilibrada, una ley que nos dice produzca, pero produzca respetando la estructura general de la ecología», complementó.
Sectores de productores del departamento de Santa Cruz, el centro más dinámico de la actividad industrial agrícola de Bolivia, demandan la revisión de esa ley, argumentando que la prohibición del uso de semillas modificadas genéticamente perjudicará el volumen y valor de la producción de granos, en particular de la soya.
La Ley de la Madre Tierra, promulgada el 15 de octubre último, ordena el uso sostenible, armónico y equilibrado de la tierra.
No obstante, el Vicepresidente aseguró que el Gobierno escuchó las preocupaciones del sector productivo y adelantó que reuniones técnicas para aclarar el contenido de ese ley y acabar con la susceptibilidad del sector agrícola y sus planes de desarrollo industrial.