
El Centro de Investigación y Formación de la AJB (CIyF) presentó un relevamiento que muestra una realidad alarmante: en los últimos 14 años las causas en el fuero de Familia crecieron un 626%, mientras que los recursos humanos y materiales asignados siguen siendo insuficientes.
A pesar de haberse creado nuevas dependencias y materializado en los últimos años el nombramiento de cargos, la situación sigue siendo muy difícil. Además, el deterioro de las condiciones socioeconómicas impacta directamente en el crecimiento de las problemáticas sociales abordadas por el fuero, como violencia, niñez, género, alimentos, salud y cuidado parental.
El informe revela sobrecarga de trabajo, falta de personal, juzgados sin habilitar y un déficit estructural que compromete tanto la calidad del acceso a la justicia como las condiciones laborales de quienes sostienen el servicio día a día.
Un crecimiento sostenido que no se detiene
En 2024 se iniciaron 300.261 causas, un 7,7% menos que en 2023, pero por tercer año consecutivo el volumen se mantuvo por encima de las 300.000. Se trata de una cifra inédita si se la compara con la serie histórica: en 2010 apenas superaban las 41.000 causas. El salto interanual acumulado en estos 14 años es del 626%.
Los picos se registraron en 2022 y 2023, que fueron los años de mayor cantidad de ingresos del período analizado. Incluso con la baja de 2024, el número sigue siendo muy superior a cualquier año previo.
Territorios más afectados: un mapa de la desigualdad
El crecimiento no fue homogéneo: departamentos judiciales como Avellaneda–Lanús (+379%), Morón (+297%), Quilmes – sede Florencio Varela (+295%) y San Isidro (+260%) encabezan el aumento en la última década.
En el corto plazo (2023–2024) hubo saltos abruptos como Escobar (+90%), Pehuajó (+47%) y Moreno–General Rodríguez (+8%), lo que evidencia la presión creciente en zonas ya sobrecargadas.
La desigualdad también se expresa en la carga de trabajo por juzgado. Mientras el promedio provincial de 2024 fue de 2634 causas, hay sedes que lo duplican o triplican:
En estos distritos, la saturación se convierte en un problema estructural, con impacto directo en los tiempos de tramitación y en la calidad de la atención.
Personal: una respuesta parcial y desbalanceada
Entre 2010 y 2024 la planta de personal creció un 143%, muy lejos del ritmo de aumento de causas. Entre 2020 y 2024 se sumaron 393 personas al fuero, pero el 72% fue destinado a la apertura de 15 nuevos juzgados, quedando solo un 28% para reforzar los ya existentes.
El informe alerta además sobre otras falencias:
Si bien en 2023 se incorporaron 109 nuevos puestos a plantas existentes (Resolución SC N°1581-21), el refuerzo quedó lejos de cubrir la demanda real.
Juzgados sin habilitar y planes que no se concretan
Actualmente funcionan 114 Juzgados de Familia en la provincia, pero hay 12 más creados por ley que aún no fueron habilitados. Estos se encuentran en zonas críticas como San Miguel, Tigre (dos sedes), Berazategui, Merlo (tres sedes), Saladillo, Chacabuco, Mar del Tuyú y Bahía Blanca.
La Suprema Corte ya había advertido en 2019, mediante la Resolución 1640/19, que era imprescindible crear 16 nuevos juzgados adicionales:
El hecho de que cinco años después buena parte de estas recomendaciones no se haya materializado muestra la falta de decisión política para abordar de raíz el déficit estructural.
Lo que está en juego
El fuero de Familia no es uno más: interviene en conflictos donde el tiempo y la atención especializada son clave para garantizar derechos fundamentales. La sobrecarga crónica, la escasez de personal y la parálisis en la habilitación de organismos comprometen seriamente la respuesta judicial.
Desde la AJB se continúa con el reclamo por:
25/11/2025