El libro “Masacre en el pabellón séptimo” de Claudia Cesaroni fue presentado en el Encuentro de universitarios privados de libertad que fue organizado por el Centro universitario de la Unidad Penitenciaria Nº9 “Tomas de Aquino”.
El libro, recomendado por el Indio Solari en su último recital, y que fue presentado junto a uno de los sobrevivientes, relata la masacre del 14 de marzo de 1978 donde más de 65 personas murieron asfixiadas, calcinadas o baleadas en el Pabellón 7 de Devoto.
En el encuentro se presentó un video explicativo de la investigación de la masacre conocida como “El motín de los colchones”, musicalizado por el indio, quien cedió su música para la promoción del libro y el dibujo, tapa del libro, fue realizado por Rocambole exclusivo para esta investigación.
El evento realizado en el pabellón Evangelico de la Unidad Nº 9 contó con la presencia de los internos que estudian en la universidad, con Rosa Bru, representantes de la Corte suprema, de madres de Plaza de mayo, de la secretaria de Derechos humanos de la Facultad de Periodismo, de movimientos de derechos humanos y miembros de cooperativas de trabajo de ex detenidos como “Kbrones” y “Hombres y mujeres libres”.
Claudia Cesaroni, abogada y presidenta del CEPOC (Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos) resaltó el término masacre “porque es una práctica brutal de generación de violencia en contextos de encierro, de construcción de los llamados motines, que en realidad son masacres. No estamos hablando del pasado sino también del presente, también queremos discutir el presente en los lugares de encierro”.
Por su parte Hugo Cardoso, sobreviviente de la masacre, destacó que dentro de todas las presentaciones que venían realizando en distintas Universidades y provincias, esta presentación en la Unidad carcelaria era la más importante por su carga emotiva y por todo lo que significa para los “cumpas” privados de libertad, “que en este evento también les venimos a traer un pedacito de calle”.
Hugo, se manifestó platense por adopción, estuvo detenido en “Olmos” y “Devoto” durante ocho años, desde sus 18. Hace 35 años que vive en la ciudad de La Plata con “trabajo legal” con su compañera de vida, quien según relató fue la única persona que lo ayudó al salir. “Cuando salí no me ayudó nadie ni el gobierno ni nadie, solo me salvó el amor de una chica que ahora es mi esposa y madre de mis hijos”, explicó.
Cardoso colaborador de la causa, que lograron que en marzo se reabra, está convencido: “No vamos a parar hasta que la justicia no le dé el tratamiento que corresponda. Cuanto más la difundimos más presión le hacemos a la causa y a la búsqueda de verdad”.