De la Redacción
El secretario general de la Unión Industrial, la CGE, la Cgera, industriales de calzados, juguetes, muebles, telecomunicaciones y empresarios pymes advirtieron por las políticas de apertura comercial y las políticas neoliberales.
“Si no estás en la cabeza del candidato, menos vas a estar contemplado por sus políticas”, había dicho la semana pasada a Página/12 Raúl Zylbersztein, secretario de la Confederación General Empresaria (Cgera) en relación a la falta de un proyecto industrial de Mauricio Macri. El presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra), Gerardo Venutolo, sostuvo ayer que el sector industrial que representa posee “dudas de un espacio liderado por Macri porque no se expide”. Es decir, hasta el momento calla sus intenciones para con la producción nacional.
“A Macri le falta discurso industrialista. Esperemos que lo tenga porque no lo veo hablar mucho de las pymes”, sostuvo Juan Carlos Sacco, secretario general de la Unión Industrial Argentina (UIA). Los sectores vinculados a la fabricación nacional de muebles, calzados, juguetes, pymes proveedoras de telecomunicaciones y la Confederación General Económica (CGE) también pusieron reparos y objeciones a una eventual gestión de Macri, por “la posibilidad de volver a las políticas neoliberales que destruyeron la industria y el trabajo argentinos”, indicó la CGE.
“Estamos esperando definiciones. Tenemos que pedirlas a ambos candidatos y luego evaluarlas. No queremos adelantarnos sin escuchar a ambos, especialmente al espacio de Macri que no lo hemos escuchado. Ya le enviamos las consultas al ministro de Producción de la Cuidad, Francisco Cabrera, que se comprometió a responder a la brevedad. Seguimos esperando”, agregó Venutolo. Adimra ya mantuvo reuniones con los equipos técnicos de Daniel Scioli. Este escenario coincide, como publicó Página/12 el domingo pasado, con el dato de que la única propuesta económica publicada en el sitio web de la Fundación Pensar, la usina de políticas públicas que dirige Cabrera, sólo especifica la iniciativa del PRO para el sector agropecuario, un proyecto netamente agroexportador en detrimento de otro más industrialista.
“No se han ocupado en clarificar lo que significa la administración del comercio exterior. Para nosotros es relevante y deberíamos tener alguna evidencia sobre este tema. Coincido con los metalúrgicos, no lo hemos escuchado al PRO sobre estas cuestiones”, afirmó a este diario Pedro Reyna, presidente de la Cámara de la Industria del Mueble. En relación con las políticas sobre las cuales debería expedirse el candidato de Cambiemos, Reyna enumeró las licencias no automáticas, la administración del comercio con Brasil y Ahora 12, que resultó un gran dinamizador para este sector.
“Hay medidas que tienen la virtud de ser realistas. No creo que haya nadie que pueda dar marcha atrás, ya que la supervivencia del sector depende de eso”, concluyó Reyna.
Entre 1976 y 2001 desaparecieron más de 100.000 pequeñas y medianas empresas, por las políticas de liberalización de los mercados, apertura indiscriminada de las importaciones, y una convertibilidad que terminó de eclosionar el sistema productivo local en 2001. Actualmente, hay aproximadamente 760.000 pymes, de las cuales 220.000 fueron creadas en los últimos diez años.
“Propulsamos seguir con un modelo productivo como éste, que genera 125 millones de pares de calzado por año, porque es necesario cuidar los puestos de trabajo, y tener previsibilidad de acuerdo a la inversión en maquinaria de tecnología aplicada al sector”, manifestó Alberto Sellaro, titular de la Cámara del Calzado. La producción actual contrasta con los números que manejaban en esa industria hacia 2001, con 36,4 millones de pares de zapatos. “El consumo que se alcanzó en esta década nace a raíz de los más de 5 millones de puestos de trabajo que se crearon. Si baja la ocupación, el mercado interno va a bajar también”, advirtió Sellaro.
La Confederación General Económica (CGE) manifestó también su “preocupación”. “En el ballottage se enfrentan dos modelos de país, uno que promete continuar con las políticas de protección y desarrollo de la industria e incentivo del mercado interno, corrigiendo aquellas políticas que sean necesarias para garantizar que se respeten los derechos de las mayorías, y otro que promete liberar importaciones y exportaciones de manera indiscriminada”, concluyó la CGE.