Así lo informó Walter Martello, quien está a cargo del Observatorio de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de la Defensoría. Se abrió una investigación para conocer cuál es el protocolo que utiliza la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide), la Policía bonaerense y las instituciones deportivas respecto al accionar vinculado a NNyA y los operativos de seguridad.
La intervención de la Defensoría del Pueblo se produce luego del partido disputado por Sarmiento de Junín y Brown de Adrogué. Antes del inicio del encuentro, se pudo ver la imagen de un policía realizándole el cacheo a un niño y también se dispuso el retiro de banderas con el rostro de Evita.
«Ante la posibilidad de que se estén violando derechos de niños, niñas y adolescentes, realizaremos una serie de pedidos de informe a la Aprevide, al Ministerio de Seguridad y al Club Sarmiento, que contrató al personal policial mediante el pago de adicionales, para conocer bajo que parámetros normativos se organizó el operativo de seguridad», explicó el Defensor del Pueblo Adjunto, Walter Martello.
Martello afirmó que prima facie surge que «el cacheo policial a NNyA en espectáculos deportivos va a contramano preceptos básicos de la Convención Internacional de Derechos del Niño, y de las Directrices de Naciones Unidas sobre el derecho a la protección de la intimidad de los niños y niñas».
El responsable del Observatorio también destacó que en la Argentina “no existe un protocolo único de actuación policial”. En ese sentido, las normativas que se utilizan en provincias como Catamarca y Neuquén destacan que los cacheos policiales a NNyA se pueden instrumentar en aquellos casos en que se encuentren demorados por delitos in fraganti o por orden judicial. Y solo pueden concretarse “cuando haya indicios racionales suficientes de que el niño, niña o adolescente podría ocultar entre sus ropas elementos o pruebas de la comisión de un hecho delictivo, especialmente aquellos de naturaleza violenta. Asimismo, en caso de cumplir los requisitos antes mencionados, los cacheos deberían realizarse en un lugar discreto, fuera de la vista de curiosos, y no en la vía pública”.
«Ninguno de estos requisitos parece haberse cumplido en el partido disputado por Sarmiento y Brown de Adrogué. Ahora esperamos las respuestas oficiales, y estaremos atentos a intentar prevenir que se registren episodios que puedan vulnerar derechos básicos de niños, niñas y adolescentes en espectáculos deportivos», concluyó Martello.