Ante la aglomeración congestionada de acontecimientos políticos, económicos y sociales que se vienen desarrollando en la Argentina de los últimos 60 días, la Agrupación Docente Rodolfo Puiggrós seccional La Plata, quiere expresar su más profunda preocupación por el avance de las políticas confiscatorias de la integridad y dignidad de los trabajadores en general y de los educadores en particular por parte del gobierno nacional presidido por Mauricio Macri.
A la reciente suspensión de las negociaciones paritarias con los docentes de la CTERA aduciendo un “error de interpretación” de los docentes del aumento propuesto por el gobierno, nuestra preocupación se acrecienta aún más al observar la presencia de personal policial disimulado de civil en la conferencia de prensa de la CTERA. Esta práctica intimidatoria de sociedad del gobierno civil con la fuerza policial para el control de las expresiones públicas de los trabajadores, constituyen una verdadera afrenta a los derechos políticos y sociales elementales lo que indica un auténtico retroceso para la joven vida democrática de nuestro país. Los trabajadores – en cualquiera de sus ocupaciones y agremiaciones – no podemos dejar pasar ni aceptar ningún tipo de provocación en nuestras organizaciones gremiales. Lo rechazamos rotundamente y expresamos nuestra solidaridad con los secretarios generales de las organizaciones sindicales de base y la conducción de la CTERA.
No podemos soslayar en nuestro comunicado, que el uso político perverso de las paritarias docentes del presidente de la nación, pone en riesgo la relación entre gobierno y trabajadores, terreno allanado en los últimos doce años de la política gremial argentina. Aun cuando haya habido amesetamientos y conflictos provinciales, nunca las paritarias constituyeron un obstáculo en el diálogo con las partes para el arribo a los acuerdos. La desinteligencia no puede ser interpretada de otra manera que se está en presencia de una nueva construcción discursiva que busca instalar la demonización del trabajador estatal para establecer la construcción de un Estado mínimo que se reflejó en el supuesto “error” del artículo 23 quáter del decreto de reordenamiento de los ministerios del 11 de diciembre de 2015, recientemente enmendado por el decreto 223/16, en el que se retrotraía el plexo normativo de la educación al conjunto de leyes del menemismo. Los educadores y los trabajadores estatales en general, no podemos permitir la restitución de un modelo de Estado que provocó la crisis orgánica del 2001 con 39 muertes aun no resueltas en la justicia.
El contexto que afecta a esta paritaria docente, coronada por la intimidación policial en CTERA, se articula con una serie de medidas políticas y económicas que expresan un verdadero retroceso sintetizado en la categoría “neoliberalismo”. Despidos indiscriminados, limitación de las paritarias, tergiversación del impuesto al salario mal denominado “ganancias”, devaluación monetaria, aumento indiscriminado y sin controles de los precios de la canasta alimentaria y escolar, transferencia fiscal al sector agroexportador, pérdida de ingresos tributarios por la eximición del pago de retenciones del agro y de la minería, aumento de las tarifas de los servicios esenciales, endeudamiento externo con los organismos multilaterales de crédito, alianza estratégica con los fondos buitres. Esta batería de decisiones se cierra con el protocolo del Ministerio de Seguridad de la Nación con la inhibición de la protesta social frente al descontento que el propio gobierno se prepara a recibir para reprimir.
En la ciudad de Davos, Suiza, como señala la pedagoga argentina Adriana Puiggrós en una nota recientemente publicada, el presidente Mauricio Macri, mantuvo una entrevista con el fundador de Gems Education Management Systems (GEMS), una empresa transnacional de escuelas y asesoramientos educativos de diverso tipo, que se extiende a más de 40 países. En dicha entrevista, el mandatario argentino invitó a la trasnacional educativa a instalarse en la Argentina.
Nos intranquiliza como docentes, la insistencia del nuevo gobierno de entablar relaciones amistosas con organismos internacionales de países centrales que piensan la educación desde una matriz selectiva con una impronta estrictamente empresarial que conecta inversión con eficiencia. La perspectiva de la OCDE es el horizonte político de este gobierno.
La agrupación docente Rodolfo Puiggrós, inscrita en la perspectiva de una escuela pública con ampliación de los derechos educativos, reafirma su preocupación por las medidas sociales, económicas y políticas tomadas por el nuevo gobierno que afectan de forma directa a nuestros estudiantes y docentes, ratifica su solidaridad con los trabajadores de la educación perjudicados por las nuevas formas de entablar las relaciones de negociación laboral y propone a los educadores y a la comunidad educativa toda, a participar activamente en la defensa de los derechos adquiridos y en la profundización de los que aún no han sido alcanzados.
– Por una educación pública, popular, de calidad.
– Por la reincorporación de los trabajadores despedidos sin causa justa.
– Por una paritaria libre, sin presiones del gobierno, que defienda el poder adquisitivo de los trabajadores de la educación.
– Por la libertad sindical.