Tras siete meses de negociaciones, el gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC dieron a conocer el pasado 21 de junio, un informe escrito de 12 páginas en las cuales ambas partes detallan de forma unificada, los resultados y el modus operandi que vienen llevando adelante en la mesa de La Habana. El documento público se dio a conocer mientras, por separado, dejan entrever públicamente algunas diferencias con respecto al punto 2, Participación política, que es el que actualmente se está debatiendo, tras haber llegado a un acuerdo con respecto al tema agrario. El próximo ciclo de conversaciones se iniciará el 1º de julio.
Dijo Michel Foucault que “la política es la continuación de la guerra por otros medios” dando vuelta así al célebre axioma de Carl von Clausewitz, pero coincidiendo ambos en que tanto guerra como política forman parte de un mismo flujo. Si a partir de esto se piensan las negociaciones de paz, podrían éstas ser comprendidas como parte de una transición para nada fácil, mucho más si se tiene en cuenta que se están realizando sin un alto el fuego y tratando de dirimir contradicciones que son las causantes de más de siete décadas de conflicto armado. Sin dudas no es como ironizan los opositores al proceso de paz, exclamando que las partes se sientan holgadamente a tomar whisky y llevando adelante acuerdos oscuros que nadie conoce. En tal sentido es válido subrayar la voluntad de ambas partes para proseguir las negociaciones a sabiendas de las diferencias. Mientras el proceso de paz va ganando cada vez más adeptos en el plano internacional, pareciera que los opositores colombianos al mismo se hubieran propuesto llevar adelante una ofensiva más frontal. Que a un acérrimo enemigo de la paz como lo es el ex presidente Álvaro Uribe, el pasado domingo se lo haya elegido como “El gran colombiano” sin dudas no es para nada anecdótico, ya que en el reality realizado por History Channel, Uribe dejó por detrás nada menos que a Simón Bolívar o a Gabriel García Márquez.
Bajo el título de Primer Informe Conjunto de la Mesa de Conversaciones entre el Gobierno de la República de Colombia y las FARC-EP, ambas partes dieron a conocer el documento de 12 páginas, subdividido en 4 puntos, en los cuales se detallan el funcionamiento y la mecánica de la mesa, la forma de recepcionar propuestas, la estrategia de difusión, los foros de participación, y en el último se realiza una descripción de los avances sobre el punto 1 “Política de desarrollo agrario integral” de la Agenda del Acuerdo General. En la introducción al informe se señala que, tras 7 meses de conversaciones se han alcanzado una serie de acuerdos: “En primer lugar sobre el punto 1 de la Agenda del Acuerdo General, que hemos denominado ‘Hacia un nuevo campo colombiano: Reforma Rural Integral’; y también sobre diferentes temas de la Mesa y de la participación ciudadana. Durante los primeros meses concretamos, por una parte, aspectos de procedimiento, y por otra, concertamos lo relacionado con la puesta en marcha de la página web, los formularios escritos, los foros para los puntos 1 y 2 de la Agenda, y la consulta directa para el punto 1, establecidos en el Acuerdo General”, dicen, agregando luego que “ya empezamos la discusión sobre el punto 2 de la Agenda Participación Política”.
Tal como ya se había informado en el comunicado conjunto del 26 de mayo, lo convenido hasta ahora en el primer punto de la Agenda forma parte de lo que sería el Acuerdo Final, un acuerdo más amplio que las partes esperan lograr en los próximos meses desarrollando los 5 puntos de la Agenda que aún quedan pendientes. En tal sentido, los principios que guían estas conversaciones es que “nada está acordado hasta que todo esté acordado”.
En el escrito se especifica además acerca de las formas de participación que tiene la sociedad civil colombiana para aportar al debate. Una es la página web mesadeconversaciones.com.co en la cual, además de poder consultar todos los documentos y comunicados realizados, es posible participar enviando propuestas acerca de los 5 puntos en cuestión, además de poder comentar. Se encuentra estipulada la posibilidad de “delegar en un tercero la organización de espacios de participación”, por lo cual la Mesa de Conversaciones ya delegó la realización de dos foros nacionales, uno al Sistema de Naciones Unidas en Colombia y otro a la Universidad Nacional-Centro de Pensamiento y Seguimiento al Diálogo de Paz.
El primer Foro Nacional sobre Política de desarrollo Agrario Integral (Enfoque Territorial) fue realizado durante los días 17, 18 y 19 de diciembre de 2012, a solicitud de la Mesa de Conversaciones, que en su comunicado conjunto del 25 de noviembre de 2012, les pidió a las dos instituciones convocar, organizar y servir de relatores de los debates y de sus conclusiones.
Pero haber realizado este documento conjunto mostrando la férrea voluntad de llegar a buen puerto con las negociaciones, no eximen de mostrar que no todo es tan simple como parece, y que las partes además expresan sus diferencias, enviándose mensajes cruzados como el que realizara el presidente Juan Manuel Santos el pasado 23 de junio en la marcha “Las víctimas le caminan a la paz”, que se realizó en El Carmen de Bolívar, y a la que asistieron 10.000 personas. Allí, Santos expresó que “hemos dicho a las FARC que tienen que reconocer a las víctimas como núcleo en esta negociación”. Y que la guerrilla “entienda, exprese su voluntad y juegue limpio” porque, de lo contrario, no se llegará a “buen puerto”, sugiriendo que “no comiencen pidiendo cosas imposibles que nadie les va a conceder, que no están dentro de los acuerdos”.
“Queremos que entreguen las armas pero que sigan combatiendo con argumentos, que cambien las balas por los votos”, dijo Santos, prometiendo que el Estado les dará “todas las garantías y todos los espacios” para que ingresen en el sistema democrático. Los dichos del mandatario fueron una respuesta a la propuesta de 10 puntos para la Participación Política que la guerrilla había hecho a través de su delegación en La Habana, en la cual, además de plantear la reestructuración democrática del Estado y reforma política, la vigencia de garantías plenas para el ejercicio de la oposición y del derecho a ser gobierno, pidieron garantías plenas a las organizaciones guerrilleras en rebelión y a sus combatientes para el ejercicio de la política en el evento de un Acuerdo final. A su vez, en el décimo punto, las FARC plantearon la necesidad de convocar a una Asamblea Constituyente, mientras que la postura del gobierno es solamente la de realizar un referéndum.
La derecha colombiana y ciertos sectores de la Justicia no se quedaron quietos. Es así que se pudieron ver en diferentes sitios, pero especialmente en Caldas, Antioquía, grandes carteles publicitarios en los cuales, mostrando la imagen del principal negociador de las FARC Iván Márquez, se puede leer “¿Usted va a permitir que un reclutador de menores sea su presidente?”. Estas vallas publicitarias se suman a que un juez de Villavicencio condenó a Iván Márquez a 40 años de prisión, habiendo sentenciado también a Rodrigo Londoño Echeverry (máximo comandante de las FARC), al extinto Manuel Marulanda Vélez (Tirofijo, quien fuera el fundador de la guerrilla) y 19 guerrilleros más. Todos ellos fueron hallados responsables de delitos de terrorismo, rebelión y homicidio en personas protegidas.
Mientras el ex presidente Ernesto Samper y la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt ven con muy buenos ojos al proceso, los veintisiete miembros de la Comunidad Europea respaldaron al gobierno de Colombia en la búsqueda de una solución negociada. Así lo afirmó en una nota la vicesecretaria general del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), Helga Schmid, tras entrevistarse en Bruselas con el ministro de Defensa de Colombia, Juan Carlos Pinzón.