Los choferes de la Línea Este continúan en conflicto. En noviembre fue dictada una medida cautelar que obligaba a la empresa a retrotraer los despidos y las suspensiones, el cese de la persecución laboral y a mejorar las condiciones de trabajo. Pero según informaron los delegados «la empresa no cumplió hasta ahora con lo pactado, y por esta razón los trabajadores se encuentran realizando distintas medidas de fuerza».
Nuevas acciones de los #ChoferesLíneaEste contra los despidos. Volanteada y conferencia de prensa el 10/03 a las 10 HS. en #SUTEBALaPlata pic.twitter.com/nmKv7A0lVC
— walter barboza (@WalterWbarboza) March 9, 2017
El reclamo exige «la reincorporación de los despedidos, la estabilidad laboral y en la exigencia de elección libre de los delegados gremiales».
En ese marco también denunciaron condiciones de precarización laboral y el amedrentamiento hacia los trabajadores del sector de mantenimiento y limpieza de las unidades, a quienes fuerzan a trabajar en doble turno y en negro.
Además, los choferes plantearon que «los colectivos no están en las condiciones establecidas por ley, lo que perjudica no sólo a los trabajadores sino a los usuarios. Los micros, que en su mayoría tienen más de diez años, no respetan a los pasajeros con discapacidad motriz, al no contar con piso bajo para el acceso de silla de ruedas, tampoco tienen aires acondicionados, ni el motor atrás, generando ruidos molestos y vibraciones». A esto se suma la falta de frecuencias (en horas pico hay que esperar hasta media hora) así como el exceso de pasajeros, que superan lo establecido por el reglamento del ministerio de Transporte.