Por Juan Quesquén Rodríguez, columnista del Tranvía.
El pasado viernes 3 de Junio se cumplió un año de la primera marcha nacional NI UNA MENOS, que se llevó a cabo en la misma fecha luego de varios hechos de violencia de género y femicidios que aparecieron en la agenda mediática.
Por aquel entonces la población decidió tomar las calles de forma autoconvocada utilizando las redes sociales para organizar la convocatoria. Miles de personas se volcaron a las plazas de sus ciudades llevando carteles con consignas referentes a la violencia de género. De aquella marcha participaron organizaciones políticas, sociales, de género, estudiantes secundarios y universitarios, federaciones y centros de estudiantes.
La primera marcha tuvo como eje principal la denuncia por parte de la población a la dirigencia política para que implemente medidas que combatan este flagelo que sacudía a la sociedad. Todo esto en el marco de una campaña electoral para elegir al nuevo presidente de la nación. Muchos políticos aprovecharon la ocasión para sacarse fotos con el hastag #NiUnaMenos ya que era políticamente incorrecto no hacerse eco de esta gran demanda.
A un año de la primer marcha las cosas no han cambiado, siguen igual. Hoy los números muestran que han muerto en la Argentina 275 mujeres víctimas de violencia de género, de las cuales un alto porcentaje de mujeres asesinadas son de la Provincia de Buenos Aires (según los datos de la ONG la Casa del Encuentro, ya que no hay datos de organismos oficiales al respecto)
Según contó Maia Luna, impulsora del Parlamento de Mujeres que se realiza todos los años en la ciudad de La Plata, el Ni Una Menos parece “una banalización por parte de ciertos funcionarios que se sacan la foto. Y Remarcó: “Pero al momento de debatir las políticas públicas que de distintos espacios proponemos en el Concejo Deliberante, quedan cajoneadas y la foto cae en una cuestión que la usan para hacer campaña pero que no debaten en las comisiones y mucho menos llegan a efectivizarse algunas de esas propuestas”.
Además sostuvo que en La Plata no hay Casas Refugio donde se puedan resolver emergencias en caso de violencia, dijo: “En la Plata no contamos con ningún espacio perteneciente a la municipalidad donde podamos resolver emergencias en caso de mujeres que tengan que abandonar sus casas por salvar su vida o la de sus hijos”.
Cabe preguntarse qué están esperando los referentes políticos para tomar acciones concretas y pasar de la foto a las políticas públicas para erradicar este flagelo que pasan miles de mujeres en la Argentina.
La movilización comenzó con una radio abierta en plaza Moreno y concluyó en plaza San Martín cerca de las 20.30 horas.