Tras las fallidas elecciones internas de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), hace ya casi un año, y donde el resultado de ellas aún está entre paréntesis, y el quiebre se muestra más que evidente, esta situación demuestra que uno de los postulados principales de esta central, como lo es la autonomía de los partidos políticos, es un punto mucho más que conflictivo, ya que justamente esto es lo que logró fracturar al agrupamiento sindical.
Mañana jueves se realizarán las elecciones en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), que es uno de los gremios fundacionales de la CTA, junto a los docentes nucleados en la CTERA.
El ATE es el principal bastión de la Lista 1 que encabezó Pablo Michelli, y que cuenta como referentes históricos a Víctor De Gennaro, y Claudio Lozano, ambos hoy decididamente lanzados al plano político, primero junto a Proyecto Sur y ahora alineados al Frente Amplio Progresista que lleva como candidato presidencial al gobernador santafesino Hermes Binner. Paradójicamente lo que le reprochaba Michelli, a la Lista 10 del docente Hugo Yasky, es que estuviesen encolumnados con el gobierno nacional, no respetando de esta forma, la supuesta “autonomía” de la central.
Pero las diferencias al interior de la central, también llegaron al ATE, y mañana un desprendimiento de la oficialista Lista Verde, se presentará en la contienda. En las elecciones de la Provincia de Buenos Aires se destaca la presentación de la Lista Azul, encabezada por Dina Marcuzzi quien manifestara que: “Lamentablemente nuestro ATE a perdido el verdadero rumbo que es defender a los trabajadores.” Y que “Además, se alejó mucho de la realidad social y se distanció de nuestros compañeros. Y para mal de males toma resoluciones que no son consultadas y mucho menos debatida en los lugares de trabajo.”
Marcuzzi se enfrentará a Oscar De Isasi, por la secretaria general del gremio a nivel provincial, y entre otras cosas, la Azul propone la constitución de la seccional La Plata, ya que ésta es una decisión postergada en una ciudad que cuenta con un número muy importante de afiliados.
Por otra parte la postulante de la Azul, consideró que en lo político sus adversarios se quedaron con la visión que la CTA tenía en los noventa, como agrupamiento de resistencia, cuando la realidad nacional cambió sustancialmente, y hoy existen cambios a favor de los trabajadores que hay que acompañar y profundizar.