La Comisión Provincial por la Memoria denunció en la Justicia que Mario Verón, un trabajador de ese organismo, fue víctima este fin de semana de apremios ilegales por parte de personal policial de la Comisaría 2° de la localidad de Ensenada.
El episodio ocurrió el sábado en la noche, en momentos en que la comuna ribereña celebraba los 212 de su fundación. Verón había salido de su vivienda, ubicada en el centro de la comuna para hacer una compra en un kiosko, cuando al llegar a la intersección de las calles San Martín y Horacio Cestino, un grupo de policías le impidió el paso argumentando que el envase que llevaba lo había comprado fuera del cerco perimetral de los festejos y que por eso no podía pasar. Pero cuando Verón intentó explicar que él vivía en la zona comprendida por ese cerco, inmediatamente le arrebataron el envase y comenzaron a golpearlo con manos y cachiporras. El grupo, según explicó Verón en la denuncia, estaba compuesto por cinco policías entre los que se encontraban por lo menos un efectivo de la Comisaría 1° de Ensenada, uno de la Comisaría 1° de Berisso y uno del destacamento de El Dique.
Verón, quien intentó aclarar en todo momento que él vivía en la ciudad hacía ya 20 años, narró que los policías le contestaron: -“Sí, ya sabemos quién sos”. Las razones de la respuesta puede ser encontrada en una denuncia que, en octubre del año pasado, Verón había hecho, también, por apremios ilegales infringidos por personal policial de la Comisaría Primera de Berisso. Tras los golpes fue trasladado a la comisaría 1° de Ensenada, adonde lo dejaron encerrado sin dar a conocer los motivos de la detención.
El caso de Verón fue el que permitió la inauguración en el gobierno bonaerense de la Comisión Interministerial, un área creada especialmente por el Ministro de Justicia, Ricardo Casal, para prevenir casos de esta naturaleza. Sin embargo los hechos se repiten.
Verón contó que “mientras permaneció en esa comisaría fue amenazado por un oficial” que cree que su apellido es Saucedo, “por el oficial de calle” y por otro que dijo que “se apellidaba Trele”.
Asimismo explicó que tres horas después de encerrado, le notificaron que lo habían detenido por resistencia a la autoridad para luego trasladarlo a la comisaría de Punta Lara donde quedó alojado hasta el domingo. El acarreo tuvo signos claros de amenaza, pues Treste lo “tomo del cuello y los genitales y lo empujó al interior del patrullero”.
Pero el asombro de Verón llegó a su límite cuando advirtió que uno de los policías que lo trasladó era el mismo que lo había golpeado en Ensenada en octubre del año pasado y que supuestamente había sido removido de la fuerza por la primera denuncia de Verón y por los objetivos propios de la creación de la Interministerial creada por Casal.
En ese marco la Comisión Provincial por la Memoria entregó una nota a Casal, a la Auditora General de Asuntos Internos, Viviana Arcidiácono, y al secretario de Derechos Humanos, Guido Carlotto. En la misiva reclama “la inmediata separación de los policías responsables”.
El Juez Garganta intervino en la causa para dar curso a la investigación y retomar la denuncia de Verón del año pasado y evitar que se abra una causa en su contra, un mecanismo habitual utilizado por la fuerza para minimizar el impacto de las denuncias contra la fuerza policial.