El alejamiento de Felipe Solá de las filas opositoras, más que hecho anecdótico, o puntual, es parte del derrotero que viene sufriendo desde ya hace un tiempo el autodenominado Peronismo Federal, su imposibilidad de conformarse como espacio político con cierta gravitación.
El martes 3 de agosto del año pasado, el CEO del Grupo Clarín Héctor Magnetto había organizado una reunión secreta donde participaron Eduardo Duhalde, Carlos Reutemann, Felipe Solá, Francisco De Narváez, y Mauricio Macri. Pero el secreto duró poco, y a contadas horas se pudo saber, que todos ellos se sentaron a debatir una estrategia electoral de cara a este año, donde entre otras cosas Reutemann dijo varias veces que no iba a ser candidato presidencial, mientras que todos los demás si albergaban esa posibilidad, inclusive De Narváez imposibilitado por su nacionalidad. La estrategia de Magnetto para vencer a Néstor Kirchner, en aquel momento sin dudas apuntaba a la unión del peronismo disidente y el PRO.
Si bien durante todo el 2010, el kirchnerismo fue repuntando en el consenso popular, resultó ser el inesperado fallecimiento de Néstor, la bisagra que destapó la olla de lo que se venía incubando a nivel social, y sin dudas este acontecimiento golpeó muy duro al arco opositor en general, y al peronismo disidente en particular.
Impedido De Narváez para poder ser candidato presidencial, fueron Duhalde, Solá, Das Neves y Alberto Rodríguez Saá, quienes se postulaban para ese cargo. De acuerdo a la vigencia de la nueva ley electoral, todos ellos tendrían que haber participado el último 14 de agosto de las PASO, pero desde el inicio de este año, intentaron mostrar un circo electoral, que se iría a desarrollar en todo el país y durante todo el año, al estilo de cómo se juegan las internas en Estados Unidos. Felipe Solá fue el primero en decirle no a todo esto, y decirles a los otros tres que los esperaba el 14 de agosto.
Tras el empate en Santa Cruz, e incluso con la sospecha de fraude, el portugués Das Neves fue la segunda deserción a la maratónica interna, la cual se inició en la Ciudad de Buenos Aires entre Duhalde y Rodríguez Saá, y ya desde el vamos comenzaron los cruces entre ambos, resultando que para el supuesto tercer encuentro, el ex bañero de Lomas se bajó de la contienda, en un lamentable hecho político, que sino fuera por lo sintomático valdría la pena olvidar. Fue así que cuando se formalizaron las precandidaturas para las Primarias de agosto, Felipe Solá desistió de competir, Duhalde fue con su Unión Popular sumando a Das Neves, Rodríguez Saá conformó Compromiso Federal, mientras que De Narváez se alió al radicalismo. Como ya es sabido Mauricio Macri se bajó de las presidenciales, para ir por la reelección en la CABA, y tal vez ello dejó sin un candidato competitivo a todo este espacio que alguna vez había juntado Magnetto en su casa. Por todo esto, el vuelco de Solá tal vez no asombre demasiado.