Su mentor, el investigador de Harvard, Ben Maoz, disertó en la sede local del CONICET sobre sus características y potencialidades.
Gracias a una iniciativa conjunta de la cátedra Emprendimientos de Base Tecnológica (EBT) de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y la Oficina de Vinculación Tecnológica (OVT) del CONICET La Plata, el prestigioso investigador del Instituto Wyss de la Universidad de Harvard (Cambridge, Estados Unidos) Ben Maoz, visitó la sede local del organismo científico para brindar una conferencia acerca de la revolucionaria técnica que impulsó como líder del proyecto “Organs on chips”.
Al respecto, Maoz dijo: “El marco regulatorio alrededor de una nueva droga que se lanza al mercado implica costosos trabajos de laboratorio para analizar y detectar sus efectos sobre el cuerpo humano”, y detalló: “Los ´órganos en chips’ pueden emular el funcionamiento de nuestros órganos y su reacción ante determinados estímulos, lo que permitiría hacer pruebas más eficaces y seguras, pero sin necesidad de experimentar con humanos”.
“Se trata de pequeños dispositivos elaborados a base de células humanas – del corazón, pulmones, o cerebro, por ejemplo – que pueden conectarse entre sí y llegar a completar un sistema organizado similar al del nuestro organismo. Esto permitiría analizar específicamente en cada órgano los efectos secundarios de una determinada droga, pero también cómo actúa de manera general. Además, podríamos ver en un modo personalizado, es decir, a cada uno de nosotros en particular, cómo afectan a nuestra fisiología”, expresó.
La innovadora propuesta se encuentra en fase experimental, pero según Maoz “ofrece infinitas potencialidades, supone un gran impacto y sus resultados ya se están viendo, porque hay actores muy atentos a ella: ya son más de veinte las compañías interesadas en fabricar los dispositivos, muchas empresas quisieran comercializarlos, e incluso la propia Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos aprobó su uso”, remarcó.
La charla se enmarcó en el ciclo “Ciencia de impacto” que apunta a difundir localmente distintos proyectos que se destacan a nivel mundial, de la mano de personalidades provenientes de instituciones de renombre. “Éste fue el primer encuentro de la propuesta y no podíamos inaugurar de una mejor manera. Esta tecnología que hoy reunió a miembros de la comunidad académica, representantes del ámbito del emprendedorismo, y posibles inversores, estuvo entre las diez más importantes del año pasado a escala global según la revista Nature, y significa un honor recibir a expertos de la relevancia de Ben Maoz”, apuntó Valeria Bosio, investigadora del CONICET en el Centro de Investigación y Desarrollo en Fermentaciones Industriales (CINDEFI, CONICET – UNLP) y una de las coordinadoras del evento.